Massiel Nieto
(Panama)
Realicé dos años (marzo 2008 a febrero 2010) de formación en el programa de Fellowship de Éndolum-CDyTE, los cuales puedo definir como una experiencia integralmente positiva. Ya que en esos dos años obtuve conocimientos y beneficios, tanto en el aspecto profesional y académico así como en otros aspectos de mi vida (cultural, personal, emocional, etc.); conocí nuevas culturas, nuevas amistades y pasé muchos momentos en los que conocí más de mí, de las cosas que uno es capaz de superar y lograr, lo que llevo a fortalecer más mi espíritu.
«Conocí más de mí, de las cosas que uno es capaz de superar y lograr»
Una de las cosas más importantes y de mayor valor para mí, desde el punto de vista profesional, que aprendí y experimenté, es: la organización, la armonía y el trabajo en equipo que se daba en todo momento con la atención a los pacientes, sobre todo la integración con las diferentes especialidades (cirugía cardiovascular, nefrología, anestesia, intensivo, neurología, etc.) que se ameritaba en cada caso y de esta manera conseguir la principal razón de nuestro trabajo que es el bienestar del paciente.
Los logros y beneficios obtenidos en los dos años de mi fellow superan los sacrificios que conllevan el realizar estudios fuera de tu país, así como estar lejos de la familia, de tu ambiente, el dar tu tiempo por completo a la formación y en un principio el llegar sola a un lugar desconocido y una cultura diferente, donde en algunas ocasiones a pesar de que se hablaba el mismo idioma muchas veces no nos entendíamos. Esto último cambió en poco tiempo, ya que con las personas que traté y el personal que me enseñó y con que trabajé me hicieron sentir parte del lugar.
«Los logros y beneficios obtenidos en los dos años de mi fellow superan los sacrificios que conlleva el realizar estudios fuera de tu país»
Los procedimientos, los tratamientos aprendidos, la investigación científica, la tecnología utilizada y los resultados que obteníamos al aplicar los mismos y, sobre todo, la sensación gratificante que se experimenta al ver cómo en cuestión de minutos-horas se puede resolver una condición crítica-grave (en muchas ocasiones riesgo de muerte) de un paciente y poder comunicarle a sus familiares que las cosas han salido bien y que su familiar se recuperará.
Todas estas cosas y más, alimentaron mi entusiasmo y determinación para continuar desarrollándome, ganando experiencia, aprendiendo nuevas técnicas e ir de la mano con la tecnología y la evolución de la especialidad. Podría comentar muchas cosas más, pero lo esencial e importante de esta experiencia y que llevo conmigo es el utilizar nuestro conocimiento y la tecnología junto con el apoyo de las diferentes especialidades para así lograr una atención integral y completa del paciente.
