¿Qué es una hernia discal?

Se trata de una enfermedad en la que parte del disco intervertebral (núcleo pulposo) se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce lesiones neurológicas derivadas de esta lesión. Pueden ser contenidas (deformación) o con rotura.

Hernia Discal
Hernia Discal

Las hernias corresponden a la mayor incapacidad en personas menores de 45 años. Alrededor del 1% de la población posee discapacidad crónica por este motivo.

Una hernia discal puede producir una serie de manifestaciones clínicas, entre las más frecuentes están el lumbago y la ciática.

Nucleoplastia Percutánea para Hernia Discal

Es una técnica mínimamente invasiva para el tratamiento de las hernias discales (cervical, torácica o lumbar), siendo una solución alternativa a la cirugía, con la cual se consigue la desaparición de la hernia y mejoría de los síntomas compresivos.

Está indicada en pacientes con hernias discales confirmadas por Resonancia Magnética y que presenten dolor radicular persistente tras al menos 3 meses de tratamiento médico y rehabilitador sin mejoría.

Técnica

Es una técnica mínimamente invasiva ambulatoria que se realiza en sala de radiología, bajo anestesia local y/o sedación consciente.

Consiste en la inyección de un producto compuesto de etanol gelificado con celulosa y nanopartículas de tungsteno en el interior del disco intervertebral bajo control de rayos X. El cual deshidrata la hernia hasta desaparecerla permitiendo descompresión inmediata y alivio
del dolor, sin dejar cicatriz.

El procedimiento tiene una duración aproximada de 30-45 minutos, una vez terminado, el paciente deberá estar en observación durante 2-4 horas y posteriormente dado de alta.

Ozonoterapia: Alternativa a la Cirugía

El tratamiento de la hernia discal es fundamentalmente conservador.

El 80% de los casos se resuelven sin recurrir a la cirugía.

Un tratamiento a base de analgésicos, anti-inflamatorios, relajantes musculares y rehabilitación suele ser suficiente para que en unas semanas el cuadro clínico remita.

Tratamiento Quirúrgico Hernia Discal

El tratamiento quirúrgico se recomienda si el dolor es muy intenso a nivel de columna o irradiado a otras zonas, o cuando hay afectación motora (pérdida de fuerza e incluso parálisis de mayor o menor grado), pero sólo si estos síntomas se mantienen durante un mes sin mejorar con el tratamiento o si, a pesar de la medicación, empeoran. Asimismo, se aconseja la operación, en este caso urgente, cuando hay pérdida de control de esfínteres o si se produce una merma de sensibilidad, la llamada anestesia en silla de montar, síntomas que indican un serio compromiso de la médula espinal.

La cirugía ofrece muy buenos resultados, pero si la indicación de intervención no es correcta los resultados no son los esperados.

Máquina de ozono

En la última década se han mostrado eficaces técnicas mínimamente invasivas para el tratamiento de la hernia discal, entre los que se destaca la Discólisis con Ozono. Esta consiste en la inyección de una determinada cantidad de ozono medicinal en el disco a través de una fina aguja, con control radiológico.

El ozono actúa en el disco deshidratando su núcleo por la degradación de los proteoglicanos, lo que reduce su volumen disminuyendo el componente compresivo sobre las estructuras nerviosas. Además ejerce un efecto antiinflamatorio inmediato por liberación de enzimas antioxidantes que neutralizarán la formación excesiva de radicales ácidos que intervienen en la producción del dolor.

Es una técnica indolora que se realiza bajo anestesia local y sedación, en régimen ambulatorio. Permite hacer vida normal a los 2 o 3 días. Con este método muchos pacientes evitan ser intervenidos al mejorar o desaparecer sus síntomas.

Aguja en el interior del disco L5-S1. Posición de frente
Aguja en el interior del disco L5-S1. Posición de frente

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